viernes, 26 de octubre de 2007

REFORMA CONSTITUCIONAL


La Fundación Concordia, DENAES, Foro de Ermua y Convivencia Cívica Catalana, presentaron ayer, 25 de octubre de 2007 en el Casino de Madrid, un proyecto de reforma constitucional que pretende poner fin a este caos político que sufrimos los españoles ya que, por si alguno no se había dado cuenta, la Constitución Española permanece en estado muy grave, con respiración asistida, por lo que antes de que alguna alma caritativa decida desconectar la máquina que aún la mantiene con vida, algunos hemos decidido que va a ser que no, que no sólo no nos van a rematar a la niña, sino que la vamos a curar y va a salir del hospital como para asistir al Baile de la Rosa de Montecarlo y bailar a lo “agarrao” con Alberto de Mónaco.
Porque Ella lo vale.
Los santos varones que lideran la iniciativa –Don Alejo Vidal-Quadras, Don Santiago Abascal, etc.- proponen, entre otras brillantes ideas, redefinir las competencias de las Comunidades Autónomas, reformar el Senado y suprimir la distinción entre “nacionalidades” y “regiones”. Pues muy bien, pero ahora la cuestión es que la pelota, está en el tejado de Don Mariano Rajoy y del Partido Popular. Si el Sr. Rajoy gana las próximas elecciones generales, debería coger al toro por los cuernos y reformar la Constitución y cambiar la ley electoral. Eso para empezar. En ese supuesto, es previsible que al abyecto ZP le hayan puesto a barrer los pasillos de Ferraz, ayudado al mocho, por la sin igual Mari Tere y que en su lugar lidere el Partido Socialista, alguien más listo, más patriota y con menos talante. Pero, ¿y si vuelve a ganar las elecciones el Sr. Zapatero? Depende. Yo por ejemplo, tengo dos opciones: la primera es regresar a Irlanda y dejar de sufrir en silencio. La segunda es comprarme un tanque del Ejército de Tierra, de esos que hay de segunda mano en algunos desguaces, y entrar en Bilbao por la A-1 para, una vez aparcado debidamente, tomarme un café con leche con un pincho de tortilla en algún bar de la Plaza Nueva. Es que, si hay que repartir, un cafecito y un tortillín es lo que más entona.